Rociadores Contra Incendios

Solicite una cotización

Contáctanos

Sede :

Av. separadora industrial nro 1358 urb. el olimpo 3ra. etapa – ate – lima

Email :

comercial@slabon.pe

Teléfono :

+51 919.299.454

    Los rociadores contra incendios son dispositivos de seguridad diseñados para detectar y controlar incendios en edificaciones. Estos sistemas automáticos de supresión de incendios están compuestos por una red de tuberías conectadas a una fuente de agua y equipadas con rociadores individuales estratégicamente ubicados. Cada rociador tiene un componente térmico sensible al calor que, al activarse debido a la temperatura elevada provocada por un incendio, permite la liberación de agua para extinguir o controlar las llamas.

    Los rociadores contra incendios son dispositivos automáticos de supresión de incendios que se instalan en edificaciones para detectar y controlar el fuego. Estos dispositivos liberan agua u otro agente extintor cuando detectan un aumento significativo de temperatura.

    Los rociadores están conectados a una red de tuberías de agua que suministran agua a baja presión. Cuando se detecta calor elevado, el componente térmico del rociador se activa, abriendo una válvula y permitiendo que el agua fluya y se disperse para sofocar el fuego.

    Los rociadores contra incendios se instalan comúnmente en edificaciones comerciales, industriales y residenciales. Su ubicación específica depende de normativas y códigos de construcción locales, pero generalmente se colocan en techos o en lugares estratégicos para una cobertura efectiva.

    La obligatoriedad de los rociadores contra incendios varía según la ubicación y el tipo de edificación. Algunos lugares, como ciertos tipos de edificios comerciales o de gran altura, pueden requerir la instalación de sistemas de rociadores según las normativas locales.

    Los rociadores contra incendios se activan automáticamente cuando la temperatura alrededor del rociador alcanza un nivel preestablecido, generalmente entre 57-74°C. El tiempo exacto depende de la intensidad del calor y la ubicación del incendio.

    Es crucial realizar un mantenimiento regular para garantizar el correcto funcionamiento de los rociadores. Esto puede incluir pruebas periódicas, inspecciones visuales, limpieza de boquillas y verificación de la presión del sistema. Se recomienda seguir las directrices del fabricante y cumplir con los requisitos locales.

    La vida útil de un sistema de rociadores puede variar, pero en general, se espera que duren décadas con el mantenimiento adecuado. Sin embargo, es posible que algunos componentes necesiten ser reemplazados o actualizados con el tiempo.

    Los rociadores contra incendios están diseñados para activarse solo cuando se alcanza una temperatura específica, lo que minimiza la posibilidad de activación accidental. Las activaciones accidentales son extremadamente raras y suelen estar vinculadas a problemas de instalación o mantenimiento inadecuado.